Los Leones del Atlas se sacaron de encima un duro primer escollo mundialista y en la tarde del miércoles igualaron 0 a 0 con el subcampeón reinante. La Vatreni jugó de mayor a menor en el estadio Al Bayt pero luego se vio sorprendida por el ritmo de los africanos.
Un tiempo para cada uno y sin emociones en los arcos. Eso mostraron Croacia y Marruecos en una contienda que dejó expuesta la realidad de la Copa del Mundo. Nada será accesible, ningún oponente cederá espacios, y cualquier resultado podría darse en Catar 2022.
Los africanos ajustaron tuercas recién en la segunda parte. La escuadra europea fue más en el capítulo inicial aunque tampoco mostró sus mejores armas. Apenas un zurdazo de Ivan Perisic que se fue por encima del travesaño, un centro de Borna Sosa por izquierda que punteó Nikola Vlasic con gran respuesta de Bono, y un tiro de Luka Modrid que salió rozando el horizontal.
En la complementaria, los de Walid Regragui jugaron a otra cosa y se convirtieron en protagonistas. Dominik Livakovic tuvo que justificar su convocatoria y le tapó una palomita a Noussair Mazraoui. Luego, el guardameta balcánico brilló al frenar un violento zapatazo de Achraf Hakimi.
Croacia perdió el rumbo en la recta final de la contienda y arrancó la Copa del Mundo con un pálido 0 a 0 frente a un rival que prometerá dar batalla. Marruecos sumó un punto de oro en un grupo bravo donde, dentro de algunas horas, harán su estreno Bélgica y Croacia.
Con información de Vermouth Deporitvo.
